Una traducción importante que pasó desapercibida

En 1997 se publicó en español la traducción del Libro de los Cambios al inglés de James Legge (The Yî king, 1882). La traducción de Legge fue la traducción de rigor en el mundo de habla inglesa hasta que se publicó el I Ching de Wilhelm en ese idioma, en 1950. La editorial Obelisco, la publicó como "I CHING El Libro de los Cambios". No pude encontrar en su libro referencia alguna al traductor, que permanece anónimo. Aunque es una excelente traducción, por ser menos clara (para el público no especializado) que la de Wilhelm, esta traducción es muy poco conocida, pero vale la pena leerla.

Esta traducción abrevia mucho el prefacio e introducción de Legge, pero su traducción del texto de los hexagramas sigue estrechamente a Legge. Lamentablemente no mejora la disposición de las notas del libro de Legge, que no están sincronizadas con los hexagramas, sino corridas, de modo que normalmente, las notas de un hexagrama, no pueden verse al pie del texto de ese hexagrama, sino al pie del siguiente hexagrama. El texto de las Diez Alas no se intercala en el texto de los hexagramas, sino que las Diez Alas se presentan en la sección Los Apéndices, eso significa que si queremos consultar, por ejemplo La Imagen, debemos saltar del texto del hexagrama que estamos consultando a Los Apéndices, y buscar allí el texto de La Imagen de ese hexagrama, lo que puede resultar engorroso.

Otra cosa que hace confusa a la traducción de Legge (y la edición en español que reseñamos) es que los nombres de los hexagramas no están escrito ni en Wade-Giles, ni en PinYin, que son los sistemas de romanización usuales. Debido a que la traducción de Legge fue publicada en 1882, usa otro sistema de romanización que es diferente. Otra peculiaridad de Legge, es que no traduce los nombres de los hexagramas, sino que muestra el nombre chino, que no es el familiar, por los motivos ya expresados.

Veamos una página, como ejemplo:

La imagen superior muestra el inicio del texto del hexagrama 32, que en la traducción de Wilhelm/Vogelmann se llama Heng / La Duración. En este caso el nombre chino es igual en Wade-Giles que en PinYin (Heng), pero Legge lo transcribe como Hang, usando otro sistema de romanización, sin traducir su significado.

Notemos que los primeros párrafos de las notas al pie de la página corresponden al hexagrama anterior. Las notas del hexagrama 32 recién comienzan en el párrafo que se inicia con: "XXXII. El sujeto de este hexagrama...".

Ahora bien, si dejamos a un lado los detalles que hacen incómoda la lectura de la obra de Legge, debemos reconocer que su traducción, y sus notas, son excelentes, y es un buen complemento a la traducción de Wilhelm/Vogelmann.

Para los lectores del idioma inglés, no podemos dejar de mencionar una versión mejorada de la traducción del YiJing de Legge, creada por Raymond Van Over, y publicada en 1971. Van Over reemplazó la romanización de Legge por Wade-Giles; reacomodó el texto, de modo que las notas están mejor situadas; intercaló La Imagen con el texto de los hexagramas; e hizo otras mejoras.